Sí, suena bizarro incluso para mí, pero hay una explicación…
No es que hagan falta excusas, pero es un tema interesante, sobre todo para ellas, que pueden sentirse incómodas cuando un hombre le clava la mirada en en esa zona. La realidad es que en la mayoría de los casos es un acto totalmente reflejo que el hombre no puede evitar. Pero hay más…
Esa imagen, en el cerebro del hombre, activa el deseo sexual, que está ligado a una mejor circulación sanguínea; en consecuencia, al volverse cotidiano, este “ejercicio” trae varios beneficios, incluyendo:
- presión sanguínea más baja
- ritmo cardíaco más lento
- menores complicaciones de la arteria coronaria y
- reducción al 50% de accidentes cerebrovasculares y ataques cardíacos.
Según el estudio, esta práctica puede alargar la vida de una persona sana hasta 5 años.